El doctor Schultz, un cazarrecompensas, busca al esclavo Django para encontrar a unos forajidos, antiguos amos de Django. Una vez conseguida su recompensa, el doctor ayuda a Django a encontrar a su esposa, Broomhilda, que fue comprada por el mayor esclavista de Mississippi, Calvin Candi.
La nueva obra de Tarantino ya está aquí, y como cualquier tarantiniana ha sido muy esperada. Hacía mucho tiempo que se hablaba de que dirigiría un western y la verdad es que ha merecido la espera. Es una historia que engancha, ya sabemos que las venganzas se le dan muy bien. El guión y la fotografía están muy cuidados, y una vez más su banda sonora es sobresaliente, con grandes momentos y unos temas muy bien elegidos.
Una vez más la interpretación de Christoph Waltz, por la que está nominado al Oscar, está a la altura de las circunstancias. También hay destacar la presencia de Leonardo di Caprio, que una vez más demuestra que Titanic le ha hecho mucho daño y que ya va siendo hora de recibir alguna que otra nominación a los Oscar (en esta edición se le esperaba). Y finalmente Samuel L.Jackson, que vuelve a aparecer en una película tarantiniana en el papel de un esclavo conservador.
Parece ser que en USA la película ha despertado ciertas polémicas, en especial por el uso de la palabra negrata. También por unas declaraciones de Spike Lee que considera que se frivoliza con el tema de la esclavitud. Y finalmente la queja de algunas asociaciones afroamericanas quejándose de la producción de figuras de acción de la película, ya que las encuentran ofensivas. Una vez más lo políticamente correcto parece anteponerse a la racionalidad.
Finalmente, os dejo uno de los temas que más me gustó de la banda sonora:
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